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Teníamos ya muchas ganas de hacer este viaje, ya que nos llamaba mucho la atención toda la historia del Día D durante la II Guerra Mundial, además de la visita a París que siempre es gratificante, además de ser una zona digna de ver y conocer.

Serían 13 días intensos de muchos kilómetros y muchas cosas por visitar.

El día 18 de julio comenzaba nuestra aventura, mi copiloto y compañera Mabé (gran copiloto ni una queja) y nuestra flamante KAWASAKI GTR1400 , con ésta máquina se llega al fin del mundo, ni un problema, hasta finalizar de nuevo en Cádiz el día 30 de julio.

En total 4.978 kms.... nada una vueltecita.

La ruta que llevamos a cabo partía de Cádiz, para llegar a Burgos, continuaríamos a La Rochelle, ya en suelo francés, Pontorson, Bayeux, Parìs, Burdeos, Olite y de nuevo en Cádiz.

DÍA 13 (30 JULIO) OLITE - CÁDIZ .... ÚLTIMA ETAPA

Como todo tiene un principio, pues ya sabéis también tiene un final...y éste era hoy.
Se acaba nuestra "gran voltereta motera".
Amaneció en Olite con lluvia, ya lo esperábamos, así que de nuevo con nuestro amigos los impermeables....
Después del desayuno salimos sobre las 09:30, teníamos por delante casi 1.100 kms, y habíamos decidido hacerlos del tirón, ya sobre la marcha y si el cuerpo lo pide haríamos noche donde nos cogiera, pero no fue el caso.


Salimos con destino a Madrid, y allí ya  tomamos la A4 , que hacía mucho tiempo que no había  pasado por Despeñaperros, después de las obras que habían hecho, con esos puentes majestuosos, jejej  y la Ruta de La Plata la tenia ya muy trillada y coger por nacionales con todos los kms. que teníamos por delante... como que no.
Pues nada todo, prefecto, al entrar ya en Andalucía notamos el calorcillo, pero nada que no fuera soportable, además paramos como 1 hora en un establecimiento con aire acondicionado y salimos súper recuperados.
Poco mas que decir de este tránsito con destino a casa, poco a poco íbamos dejando atrás todo lo vivido en estos intensos 13 días.



A eso de las 10 de la noche llegamos a Cádiz, moto al garaje, y todo sin novedad, perfecto. Nos felicitamos mi copiloto, (lo vuelvo a decir, que bien se portó mi chica con la de veces que sube y baja de la moto por el tema fotográfico... jejeje) y yo mismo por llegar en perfecto estado y sin ningún percance.
Ya pensando en la próxima voltereta...., aunque en la foto parezca que estoy loco por una cama ... (que lo estaba...jajaj) hasta la foto salió "cansada".


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